Blogia
Torrevieja Digital

PEDRÓPOLIS

PEDRÓPOLIS

por Antonio José Vera Ortigosa

El escudo de Torrevieja situado en la Avd. de la Libertad es, a pesar de su escasa relevancia, parte de la imagen de nuestra ciudad y otro de esos símbolos con valor sentimental que tiene los días contados por culpa de la fiebre ególatra de nuestro demolition man local.

El futuro y la falta de mantenimiento tanto de él como de su entorno, es un ejemplo perfecto de lo que le importa a Pedro Hernández Mateo nuestra ciudad y sus referentes, y de cómo ha sido su gestión durante  2 décadas. Si bien puede parecer que dicha gestión se ha caracterizado solo por la prepotencia, el partidismo y el derroche económico, lo que realmente ha caracterizado sus años de edil ha sido su megalomanía y un ansia enfermiza por pasar a la historia haciendo obras tan llamativas como inútiles.

Así, mientras la decadencia ambiental y urbanística se hacía cada vez más patente, la proliferación de inutilidades continuaba sin pausa. Inútil fue hacer un  palacio de la música con un aforo tan ridículo; inútil fue hacer un teatro pensando en el MOMA y no en que la gente tiene que caber en los asientos; inútil es promover parkings que nadie quiere pagar. Y catedrales que no se llenaran nunca.

Pero lo peor es que esa fiebre megalómana se ha desbordado en esta última legislatura. Los proyectos presentados en el último año son auténticos desvaríos mentales con los que vamos a tener que apechugar durante décadas. En una ciudad donde faltan millones de euros en inversiones para hacerla atrayente y humana, se sigue invirtiendo en contra del sentido común: vamos a demoler todo el Club Náutico para correrlo “unos metros”; vamos a hacer un Ayuntamiento para la Mata con el único fin de tener contentos a los que tienen que votarle en el próximo congreso local del PP; vamos a dejar en manos privadas miles de metros  de suelo publico para pagar una postal marítima; vamos a hacer 8 pistas de padel (¿se viene Aznar a vivir a Torrevieja?)y lo más increíble, nos vamos a gastar 6 millones en hacer un edifico de 10 plantas para llenarlo de tronos, un disparate de tal calibre que no merece la pena ni intentar razonarlo.

Por suerte, muchos de los suyos van recuperando el sentido común y están a punto de darle la patada. A ver si lo hicieran pronto y nos ahorráramos algo, que 2 Caudillos por siglo son demasiados hasta para la proverbial despreocupación torrevejense y como nos descuidemos, nos levantamos un día viviendo en Pedrópolis en vez de en Torrevieja.

Viñeta: de Forges .  http://www.buesaenvanguardia.com/wp-content/themes/pool/images/el_imperio_de_la_ley.jpg

1 comentario

Mauricio Canales Limón -

¿Este pollo no es el que estaba a muerte con Ángel Giménez y ahora lo está con Ángel Sáez?